1-Para dar una opinión o un consejo a alguien hay que conocer primero si está en condiciones de aceptarlo o no.
2-Hay que tener cierto grado de proximidad con la persona y asegurarse de que confía en tu palabra.
3-Empieza con temas con los que la persona tenga afinidad y busca entrar en materia para ser bien comprendido.
4-Sopesa la ocasión y mide si es mejor dirigirse directamente de forma personal o por escrito.
5-Pon de relieve las cualidades de la persona a la que quieres aconsejar y, usa todos los recursos para estimularla a corregirse, tal vez hablando de tus propios fallos y defectos sin tocar los suyos, de modo que pueda ver si esos defectos los comparte contigo.
6-Una opinión o consejo, si se toma de la misma forma que tomaría el agua un sediento puede corregir defectos.
7-Ten misericordia de la persona, sobre todo si su defecto es muy arraigado.
8- Reflexión final: ¿Cómo puede pensar nadie que avergonzando a alguien, va a convertirlo en un hombre mejor?
(Hagakure-Yamamoto Tsunetomo.)